Cuando hace frío, conducir implica enfrentar una serie de riesgos adicionales. Conocer los peligros y saber cómo evitarlos no solo te protege a ti y a los demás en la carretera, sino que también te ayuda a cuidar de tu carnet de conducir. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), durante los meses fríos, la accidentalidad y la tasa de pérdida de puntos por infracciones relacionadas con la conducción segura aumentan de manera significativa. En este artículo, analizamos Peligros del Frío al Conducir:

1. Hielo en la Carretera: El Enemigo Invisible

El hielo en la carretera es una de las amenazas más comunes y peligrosas durante el invierno. Este fenómeno, conocido como «hielo negro» o «hielo invisible», es especialmente traicionero porque es difícil de detectar. Según estudios de la DGT, la presencia de hielo en la calzada incrementa las probabilidades de sufrir un accidente hasta en un 30%. Esto se debe a que reduce drásticamente la adherencia de los neumáticos, dificultando el control del vehículo y aumentando la distancia de frenado hasta tres veces.

¿Cómo prevenirlo?

• Conduce a una velocidad reducida y mantén una distancia de seguridad mayor que en condiciones normales. Recuerda que frenar en una superficie congelada es mucho menos efectivo.
• Utiliza neumáticos de invierno si vives en zonas propensas a heladas intensas; estos neumáticos están diseñados para mejorar la tracción en temperaturas bajas.
• Observa las condiciones de la carretera y evita las áreas con sombras prolongadas, donde el hielo puede persistir a lo largo del día.

Adoptar estas precauciones puede marcar la diferencia y evitar multas o pérdida de puntos por infracciones relacionadas con la conducción temeraria o la falta de control del vehículo.

2. Fallos Mecánicos: Baterías y Sistemas de Encendido

El frío extremo afecta tanto al conductor como al vehículo. Las bajas temperaturas son una causa común de fallos en las baterías, afectando el sistema de encendido. De hecho, los datos del Real Automóvil Club de España (RACE) indican que aproximadamente el 50% de las llamadas de auxilio en invierno están relacionadas con fallos en la batería. No poder arrancar el coche puede llevar a situaciones de emergencia en lugares aislados o peligrosos, además de retrasar el viaje.

Consejos para evitar problemas mecánicos:

• Revisa la batería antes de que llegue el invierno y asegúrate de que está en buen estado.
• Utiliza líquidos refrigerantes y anticongelantes adecuados para tu vehículo, lo que ayudará a mantener el motor en funcionamiento incluso a bajas temperaturas.
• Inspecciona otros elementos clave como el sistema de frenos y los limpiaparabrisas, ya que cualquier fallo podría ser peligroso en condiciones adversas.

Mantener el coche en óptimas condiciones no solo es crucial para tu seguridad, sino también para evitar sanciones. Un fallo mecánico en carretera que termine en una infracción, como por ejemplo detenerse en un lugar indebido, podría resultar en la pérdida de puntos en tu carnet.

3. Baja Visibilidad: Niebla y Nevadas

La baja visibilidad es un problema grave en invierno. La niebla y las nevadas intensas limitan la visibilidad y hacen que el conductor tenga menos tiempo para reaccionar ante obstáculos. Según la DGT, la niebla es un factor en el 20% de los accidentes durante los meses fríos, mientras que las nevadas pueden bloquear carreteras y dificultar la conducción de manera significativa.

Cómo mejorar la visibilidad en invierno:

• Usa las luces adecuadas: activa las luces antiniebla cuando la visibilidad se reduzca a menos de 100 metros y las luces de cruce en todo momento.
• Conduce más despacio y mantén una distancia segura, especialmente si hay una densa capa de niebla o nevada.
• Evita cambios bruscos de carril o frenadas repentinas. Las condiciones de baja visibilidad requieren movimientos suaves para que los vehículos que vienen detrás puedan reaccionar con tiempo suficiente.

Recordar estos consejos y mantener la paciencia son esenciales, para afrontar los Peligros del Frío al Conducir ya que las sanciones por conducción imprudente pueden resultar en multas y la pérdida de puntos en el carnet.

4. Deslizamiento y Aquaplaning: El Riesgo de las Lluvias

El aquaplaning es un fenómeno en el que el coche pierde contacto con la superficie de la carretera debido a una capa de agua, lo que hace que las ruedas «floten» y el conductor pierda el control del vehículo. Esto ocurre con más frecuencia en invierno, cuando las lluvias son más abundantes. Según el Instituto Nacional de Estadística, el 15% de los accidentes en invierno están relacionados con deslizamientos en superficies mojadas.

Estrategias para prevenir el aquaplaning:

• Mantén tus neumáticos en buen estado, asegurándote de que tengan la profundidad de dibujo adecuada para drenar el agua.
• Reduce la velocidad cuando la carretera esté mojada, ya que el riesgo de aquaplaning aumenta con la velocidad.
• Evita charcos y áreas de agua acumulada en la carretera, y trata de mantener el control firme del volante.

Controlar estos factores no solo mejora la seguridad, sino que ayuda a prevenir accidentes que podrían resultar en infracciones y pérdida de puntos en el carnet de conducir.

¿Qué Hacer si Pierdes Puntos en Invierno?

Aunque el frío y las condiciones de invierno son responsables de muchos incidentes y sanciones, es importante saber que puedes recuperar puntos de carnet a través de cursos de sensibilización y reeducación vial. Nuestros cursos están homologados y te permiten recuperar hasta 6 puntos. Además, mantener una conducción sin infracciones durante dos años también restaura automáticamente los puntos perdidos.

Peligros del Frío al Conducir, No Pierdas Puntos. La conducción en invierno presenta una serie de riesgos adicionales que exigen mayor preparación y prudencia. Evitar el hielo, realizar revisiones mecánicas, mejorar la visibilidad y prevenir el aquaplaning son medidas clave para proteger tu seguridad y evitar infracciones. Conducir con precaución no solo protege a los conductores, sino que también previene la pérdida de puntos en el carnet y el costo que conlleva tener que recuperarlos.